Nuestro trabajo ha encontrado muchos retos en el camino.
Sentido se focaliza no solo en el trabajo de terapia con pacientes psicológicos, sino también, en la prevención, educación y capacitación acerca de la importancia de la salud mental como herramienta principal del trabajo en prevención del suicidio.
Pero no es fácil.
Vivimos en una sociedad compleja, heterogénea y de matices muy diversos y extremos. No todos pensamos igual, no todos tenemos la misma disposición ante la vida o ante el sufrimiento de los demás; por ello, muchas veces no nos percatamos de que los comentarios que hacemos pueden herir a otras personas que, quizás, están experimentando algo que nosotros nunca hemos vivido.
La falta de educación con respecto a la salud mental, el morbo que se contagia en redes sociales y la estigmatización que se hace de las personas que sufren no cesará de un momento a otro, eso lo sabemos. Por ello, parte de nuestro trabajo se concentra en la educación respecto de ello.
No obstante, hay algo que sí te podemos pedir cambiar de manera más rápida: considera que quienes van a leer o escuchar tus opiniones pueden estar sufriendo. Quizás no lo sepas, quizás ellos mismos no deseen que te enteres… pero están allí, frente a la pantalla del teléfono o la laptop, leyendo aquello que otras personas comentan sobre temas tan sensibles como las ideas suicidas, la depresión o el duelo debido a suicidio de un ser querido… temas que para ellos no son “temas”, son una realidad del día a día. Por eso… considera a estas personas antes de comentar.
Haz que la empatía sea realmente la mejor aliada de la prevención.