Los psicólogos que trabajamos ofreciendo el servicio de terapia y de prevención de distintos problemas de salud mental, realmente disfrutamos ayudar a quienes nos buscan. Muchas veces, se puede pensar que, debido a nuestro trabajo, somos “fríos” o que “no nos importa” como se sienten las personas que acuden a buscar nuestra ayuda. Esto es falso.
Por ello, es necesario que sepas las siguientes 4 cosas:
- Estoy muy feliz de que hayas venido
Me alegra muchísimo que busques ayuda para ti mismo/misma. Gracias por confiar en mí.
- Te desafío porque me preocupo por ti.
No te planteo que hagas cosas para que te sientas mal. Muy por el contrario, lo que más deseo es que mejores, por ello, a veces te reto a que realices actividades que pueden ser difíciles, pero que te harán mejora.
- Veo tu potencial incluso cuando tú no lo haces.
Sé que, muchas veces, piensas que no eres bueno o buena, o que no alcanzarás algo mejor. No obstante, yo veo tu potencial y por ello trato de empujarte a desarrollarlo.
- No tengo todas las respuestas.
Me gustaría poder decirte que responderé todas tus preguntas, pero no quiero mentirte, hay cosas que no sé. Al igual que tú, soy también ser humano.